«Tu promesa es a toda prueba
y tu siervo la ama»
(Sal 118/119,140)
(1Sam 2,1-10).7
(2Cor 4,1-12).
(Jn 1,1-14).
1 David: la grafía de este nombre no es uniforme, quizá debido a las diferentes fuentes.
2 Neemías o Nehemías, grafía variable (cf. nota precedente).
3 La íntima relación entre apostolado de la edición y estudio de la Biblia es uno de los temas fundamentales de LS (cf. pp. 72s; 98s, 191-193, 289-294, 306, 317s) así como del precedente El Apostolado de Edición, y está en la línea de la enseñanza del Concilio Vaticano II: «La Iglesia, esposa de la Palabra hecha carne, instruida por el Espíritu Santo, procura comprender cada vez más profundamente la Escritura para alimentar constantemente a sus hijos con la palabra de Dios»; por eso «los exegetas católicos y los demás teólogos... deben investigar con medios oportunos las Escrituras, de modo que se multipliquen los ministros de la palabra capaces de ofrecer al pueblo de Dios el alimento de la Escritura, que alumbre su entendimiento, confirme la voluntad, encienda el corazón en el amor a Dios» (Dei Verbum, n. 23).
4 Aquí se habla de “sentido pleno” o sensus plenior. Cf. p. 40, nota 7, n. 3.
5 «La semilla es la palabra de Dios». LS indica erróneamente “Lucas XVII, 11”.
6 Charles Gounod (París 1818 - St. Cloud 1893), ex seminarista, además de música había estudiado letras y filosofía. Ganador del Grand prix de Rome, donde permaneció en 1840 y 1841, se entusiasmó por las interpretaciones polifónicas de Palestrina, hasta el punto de que él mismo compuso una misa que le valió el título de maestro de capilla en la iglesia romana de San Luis de los Franceses. En su brillante carrera operística alcanzó éxitos triunfales en Viena y en Leipzig, además de París. Es muy popular su Ave Maria, adaptada a un preludio de J.S. Bach.
7 LS indica 1Re por 1Sam.