INTRODUCCIÓN¡Haced apóstoles! Y dadles por guía a María:
la Apóstol y la Reina.1
Lucifer ha desencadenado en el mundo a sus ángeles, y éstos han reclutado entre las filas de los incautos y perversos el ejército del mal para ruina eterna de las almas.
Hoy usan especialmente la prensa, el cine, la radio, la televisión y otros medios modernos.
Los católicos tengan en sus casas además de el Evangelio, el Crucifijo, el cuadro de la santísima Virgen y un mapa. Intenten señalar con tinta roja las regiones donde el cristianismo prevalece; y con tinta negra donde es minoría. Señalen las regiones donde predomina el catolicismo y donde predomina el cisma o la herejía. Intenten, aún, señalar las regiones donde la vida católica está vigente en las leyes, instituciones, escuelas, relaciones sociales; y aquellas donde se da el mísero espectáculo «de católicos bautizados, pero que llevan una vida paganizante» sin la verdadera práctica, en público y en privado, de la propia fe...
¡Inténtenlo! ¡Resulta un cuadro desolador, pero realista! Y tal constatación espabile a cada alma. He aquí una gran meditación que hacer: