Opera Omnia

APOSTOLADO DE LA PRENSA[DFin 18-19. 56. 59. 61. 62. 72. 74. 75. 78. 85. 89. 93ff. 111-112. 114-121. 124-131. 132-136. 145. 146. 147. 160. 202. 206-207] La prensa. Programa

1. Escribir: es predicar, comentar, divulgar, aplicar a la vida el santo evangelio. Del mismo modo que Dios habló y escribió, que Jesucristo habló e hizo escribir, que los apóstoles hablaron y escribieron. La predicación impresa es más precisa, en su parte principal, para llegar a todos.
2. Imprimir: en este aspecto tiene que ver con la técnica para actuar más de prisa, mejor, con independencia. Es preparación de los elementos, organización científica, composición, impresión, encuadernación. En este sentido la imprenta no es arte, sino que se sirve del arte; no es industria, pero utiliza la industria, y eleva el arte y la industria a la altura de apostolado.
3. Divulgación: hacerla llegar a todas partes, a todos, según las necesidades. a) La naturaleza de las necesidades determina la naturaleza de las iniciativas. b) La intención es llegar a todos, incluidos los que no van a la iglesia.

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1. Teoría general. a) La historia (Escritura, padres, doctores, papas, santos). b) El apostolado de la prensa. c) El estado de la prensa. d) El valor, los peligros, las ventajas. e) Los medios: teléfono, telégrafo, radio, etc. f) Cómo se escribe: fuentes intrínsecas y fuentes extrínsecas; el estilo, la lengua, los escritores. g) Los medios de difusión: los cooperadores, el clero, las librerías, los centros, las bibliotecas, etc.
2. Teoría especial. a) Los géneros: el periódico, el libro, el opúsculo, la novela, la poesía, el boletín parroquial, el periódico ilustrado, el semanario, el diario, etc.; los géneros literarios van de la liturgia al humorismo, al género satírico. c) Cómo se escribe: la finalidad a que se tiende, la tesis. d) La aprobación, la corrección de pruebas, la gráfica. e) El arte de vender, la contabilidad. f) La organización.
3. Técnica general: Los instrumentos: papel, tipos, márgenes, maquinaria de imprenta y encuadernación, el correo. Técnica especial: cajista, impresor, encuadernador, estereotipista, linotipista, monotipista, grabador.

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1. La prensa como apostolado es, sustancialmente, de institución divina. Fue Dios

quien ordenó que se escribiera; fueron los apóstoles quienes lo hicieron; es la Iglesia la que lo practica; son los padres, los doctores y los santos los que al hacerlo se hicieron ilustres. Unas verdades divinas llegan a los fieles de viva voz y otras por la Escritura.
2. El apostolado de la prensa tiene fuentes intrínsecas y extrínsecas. Las intrínsecas son: la Escritura, la Tradición, la teología dogmática, moral, ascética, mística, pastoral; el derecho canónico, la liturgia, la historia sagrada y la eclesiástica. Las extrínsecas son: la filosofía, la historia profana, la literatura, la legislación civil, las ciencias experimentales, etc.
3. El método, en general, es el de la Escritura y del evangelio. En particular, es diverso según los géneros: periódico, libro, apología, etc.
Aquí viene a cuento cuanto contiene el tratado de elocuencia y los libros sobre el arte de escribir y los tratados de pedagogía religiosa.

[DFin. 23. 61. 62. 74. 83. 110. 111-112. 124-131. 137-143. 144. 151. 203-205] San Pablo

1. San Pablo fue vas electionis¹ et doctor gentium,² vaso elegido en el que el Espíritu Santo derramó sus

mejores dones: una fe indefectible, una esperanza firmísima, una caridad ardentísima, una ciencia altísima. Doctor gentium que defendió, que iluminó, que conquistó para nuestro señor Jesucristo. Su apostolado en el mundo fue un milagro continuo por el modo, por las circunstancias y por las conversiones. Abundantius his omnibus laboravi.³
2. Qué hace: Desde el cielo es poderosísimo, porque en la tierra fue muy santo; obtendrá hasta el final de los siglos ciencia, castidad, apóstoles; nos obtiene especialmente tres gracias: el ardor, las conversiones, el apostolado. En el cielo honra a Dios, en la tierra será siempre gloria de la Iglesia, ojo para los pontífices, modelo de toda obra de apostolado.
[DFin 80] 3. Debemos leerle como modelo de ciencia altísima que trasciende los siglos, los lugares, las cuestiones; y como modelo del apostolado de la prensa; invocarle especialmente con la coronita, con las invocaciones acostumbradas en la casa; imitarle según el espíritu con que nos lo describe san Juan Crisóstomo.

[DFin 28. 110. 111-112. 124-131. 144. 208] María, Reina de los Apóstoles

1. La «Regina Apostolorum». De ella se debe creer que fue la madre del Apóstol

del divino Padre, el Verbo divino; que es madre, maestra y reina de todo apóstol desde el nacimiento de Jesús, su cabeza; que así fue proclamada desde la cruz; que tal se mostró con los apóstoles especialmente en Pentecostés; que fue siempre la inspiradora y la protectora de todo apostolado de la palabra y de la pluma y la formadora de los apóstoles de todo lugar y tiempo.
2. Le debemos amor y confianza iluminada e ilimitada, la devoción más cordial, expansiva y tierna; las prácticas más comunes y constantes, como el rosario, el ángelus, las tres avemarías, la coronita, el sábado, etc.
3. También debemos hacer que sea honrada escribiendo, predicando sobre ella, dando ejemplo.
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[DFin 115-121. 132-133. 137-143. 166] Conclusiones

1. Hemos meditado que el hombre fue creado para el cielo, únicamente para el cielo. Todo el trabajo del hombre consiste en no dejar el corazón entre los bienes presentes, sino en servirse de ellos como medios para alcanzar el cielo. Todo el mal consiste en confundir el fin con los medios. Si se ha hecho esto, hay que convertirse y poner definitivamente el corazón, las fatigas y el trabajo en el cielo. Fruto de la primera parte es, por tanto, la conversión total de la vida hacia la eternidad.
2. Jesucristo es el camino del cielo; camino único, camino seguro; es la verdad, porque guía la mente de modo que nunca se equivoque, sino que se sobrenaturalice, se divinice. Es la vida, por lo que se debe adherir siempre a Jesucristo y mantener el corazón y la vida en el camino por Él señalado. La conclusión de la segunda parte es: vivir en Jesucristo hasta poder decir «vivit vero in me Christus»:⁴ mente, corazón, voluntad. Fruto de la segunda parte son las opciones: vocación o modo de seguirla, o punto particular.

[DFin 35] 3. De tres modos se camina con Jesucristo: en el camino de los mandamientos, vida cristiana; en el camino de los consejos evangélicos, vida religiosa; en el camino del celo, vida de apostolado.
Todo se realiza en el Espíritu Santo, porque del mismo modo que en la vida de Jesucristo, la vida de la Iglesia y la vida sobrenatural de las almas se comunica, se desarrolla, se perfecciona y se consuma en el Espíritu Santo. Por eso nuestro estudio es doble, para que se forme Jesucristo en nosotros. Cooperación con propósitos especiales y oración con la abundancia de las prácticas.